lunes, enero 16, 2006

Levantamiento del programa de Pepe Eliaschev

El 30 de diciembre de 2005 se levantó sorpresivamente el programa "Esto que pasa", conducido por Pepe Eliaschev, que se emitía por Radio Nacional.

Creo que el levantamiento del programa no implica censura necesariamente. El periodista, en teoría al menos, tiene posibilidades de difundir su programa en otras radios.

Se habla mucho sobre las presiones del Poder Ejecutivo sobre los medios de comunicación y lo que las mismas provocan. Pero creo que en lo que se refiere a la publicidad oficial que maneja el gobierno como instrumento de presión es cuestión de los medios no dejarse intimidar a través de estas herramientas.

También se habla de las rabietas del Presidente cuando lee una nota que no le gusta. Para mí, mientras no envíe bandas de patoteros a presionar a los diarios y radios privadas, como hizo con Shell ante la subida del precio en sus surtidores, los medios no tienen por qué amedrentarse ante esto.

Lo que sí habla muy mal del gobierno es la forma en que maneja sus propios medios y la falta de tacto que tuvo al momento de levantar el programa de radio de Eliaschev. Esa falta de tacto hace sospechar de la sensación de impunidad con que se maneja el Poder Ejecutivo en estos aspectos.

Sirve al análisis de este hecho, como panorama visto desde dentro, algunos párrafos del mismo Eliaschev en su columna en el diario Perfil el 5 de Enero de 2006.

Sobre las repercusiones del levantamiento del programa:
La sobrecogedora reacción de solidaridad tras el levantamiento de mi programa reveló energías vigorosas que Kirchner hasta hoy ignora, omisión que, no ahora, pero sí en el mediano plazo, les costará políticamente mucho más de lo que imaginan en la Casa Rosada.
Sobre el manejo de la radio oficial:
(...) el Gobierno maneja contenidos de emisora supuestamente pública con verticalidad autista: dispone como si fuese un negocio privado.
Cita las palabras de otro periodista progresista respecto al levantamiento:
(...) una actitud propia de un gobierno que lleva la característica personal de su Presidente, un hombre de extrema medianía que suele poner en marcha la lengua mucho antes de lo que hace funcionar sus neuronas.
Sobre la intervención del gobierno nacional en las emisiones diarias:
En 2005 un comunicado de Oscar Parrilli ordenó que Nacional interrumpa obligatoriamente sus programas cada vez que habla Kirchner, y transmitir sus palabras, sí o sí.
Conclusiones finales:
De momento, para ellos hay viento de cola. El cobarde ataca solo cuando está a salvo.


(Fuente de la foto: www.pepeeliaschev.com.ar)

1 comentario:

Louis Cyphre dijo...

No deja de ser muy llamativa la muy marcada tendencia de los sectores progresistas a preocuparse por la censura o los ataques a las libertades civiles sólo cuando ellos son el blanco. Mientras no los afecte, son capaces de tolerar y justificar cualquier cosa. ¡La pucha que es lindo es ser progre!