jueves, enero 19, 2006

Donación de órganos: propuestas interesantes

Será porque soy una persona que se aburre fácil o será por otra razón que no conozco. Pero me atrapan las ideas originales.

Éstas tal vez luego prueben no ser tan buenas como prometen, pero creo que sirven para despejar la mente y pensar en nuevas soluciones más apropiadas para los problemas de nuestro tiempo.

Para el tema de la donación de órganos, en ese post se sugieren un par de ideas con el objeto de resolver el problema de la escasez de órganos para la gente que los necesita.

En resumen, se plantean dos propuestas:

Una es permitir que los donantes o sus familiares reciban una compensación económica.

Básicamente consiste en introducir la donación y recepción de órganos en el ámbito del mercado. En principio puede sonar feo para muchos, por la poca estima que generalmente se le tiene al comercio como ámbito genuino de arbitraje entre los intereses de quienes demandan y ofrecen productos y servicios.

El artículo propone una forma poco incómoda de practicar esta solución la cual sería permitirles a la organizaciones de obtención de órganos pagar los gastos funerarios de los donantes.

La otra propuesta consiste en aplicar la regla "no lo ofreces, no lo recibes" que consiste en restringir los transplantes de órganos a aquellos que previamente acordaron ser donantes de órganos.

Esta última no me cierra del todo en cuanto a cómo llevarla a cabo cuando se le debe negar un transplante a una persona que está al borde de la muerte y no había manifestado anteriormente su intención de ser donante. Aunque el artículo sugiere simplemente incorporar la condición de donante al puntaje que se le calcula al paciente con vistas a incluirlo en la lista de receptores.

He hecho un simple resumen por lo que para más detalles recomiendo leer el artículo.

1 comentario:

Louis Cyphre dijo...

No es un tema fácil, ya que generalmente se mezcla con cuestiones con un alto contenido emocional. Cuando se empezó a plantear el tema de convertir por ley a todo el mundo en donante presunto en los 90, no veía tan mal la iniciativa. Me parecía que era un abuso por parte del estado, pero en parte tolerable para lograr un beneficio social mayor.

Después la exposición a las ideas libertarias me terminó de contaminar el cerebro. Considero que es una intromisión inaceptable del estado con nuestro cuerpo.

En principio, no me parece una mala idea la de recibir una compensación económica a cambio de la donación de órganos. Pero desde ya me imagino la letanía de objeciones que una propuesta de este tipo puede llegar a generar.

No estoy tan seguro de la segunda propuesta: "no lo ofreces, no lo recibes". Creo que la primera propiedad de las personas es sobre su cuerpo y la decisión de donar o no órganos pasa por una cuestión personal, de cada uno. Nadie más debería tener voz ni voto en el tema.