Creo que valen todos los pedidos de disculpas que haga Bolivia y la radio puede adminirlas o no. Pero de ningún modo entiendo por qué el gobierno se tiene que meter en esto pidiendo explicaciones a los propietarios de la radio. Eso va reñido, para mí, con la libertad de prensa. Aunque aquí se trate más de libertad de broma ue de prensa.
Finalmente, ya tenemos en todo esto un pretendido defensor de pobres. El Ministro de Justicia ha dicho:
"Es inaceptable, desde una posición de supuesta superioridad, intentar humillar a un presidente democrático"
Me pregunto de qué supuesta superioridad habla este funcionario. Parece que si se llama a un boliviano desde España para gastarle una broma se debe a que los que realizan la llamada se creen superiores. Otro caso en que asume por antemano una discriminación antes de que realmente se produzca
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