miércoles, abril 05, 2006

Cine: pensamiento progre


Aquel enunciado o frase que se sostiene por sí mismo y que no necesita explicación por parte de quien la pronuncia expresa un pensamiento que está arraigado profundamente en la sociedad.

Este prefacio viene a cuento porque en la entrevista publicada por Clarín al director de cine argentino Marcelo Piñeyro éste dice:

“La gente cada vez ve más cine americano. Una locura".
Esta frase es un ejemplo del entorno progre de toda la entrevista realizada al cineasta. Llena de pensamientos y frases que no intenta siquiera justificar y cuya certeza el lector promedio desgraciadamente dará por sentada.

En estos casos conviene ponerse un poco cuestionador y analizar sus frases y pensamientos.

Lo primero que uno se pregunta es por qué está mal y es una locura que la gente elija el cine que le gusta.

Otra de las quejas de Piñeyro va contra los multicines en Argentina a los que acusa de programar las películas que vienen del país del norte en detrimento de las nacionales.

Nuevamente apela al argumento de que debería asegurarse un mínimo de salas y horas de exhibición a las películas argentinas.

También me pregunto por qué debe ser así. Si a la gente no le interesan las películas dirigidas por él antes que una de un ignoto director, por qué el estado debe obligar a los cines a proyectarlas.

La entrevista es larga y está llena de estos sinsentidos propios del pensamiento progre que reconozco que me facina analizar y desmembrar para descubrir su inherente insensatez.

La última película de este director, El Método, ya fue comentada en este blog anteriormente.

Piñeyro se vanagloria en la entrevista de que con esa película se metió en el mundo de la selección del personal y las cosas «gravísimas» que ocurren en él. Lo que no aclara es que su preocupación parece centrarse en lo que les pasa a un selecto grupo de personas que son los ejecutivos de empresas que ganan cientos de miles de dólares al año.

No creo que el análisis del «sufrimiento» de esta gente, que ha elegido un camino muy sacrificado pero que da muchos réditos económicos, amerite preocuparse mucho y terminar identificando sus «desgracias» en el mundo laboral con lo que le ocurre al resto de los mortales.

2 comentarios:

BlogBis dijo...

Lo de Piñeyro es además un progresismo interesado, el no quiere películas yanquis porque pretende que en las carteleras sólo se exhiban los bodrios industria nacional, como la porquería de "Caballos Salvajes" que supo tener sus cinco minutos de fama.
Seguro que con los dividendos que le dió, Piñeyro se dedicó a financia proyectos productivos en la cuña boscosa, no?

Louis Cyphre dijo...

Siempre es así. Por detrás de estas defensas apasionadas de los "grandes temas nacionales" se esconden los más mezquinos intereses sectoriales. Cada corporación cuida su quintita. Guarda con tener que competir en algún momento, Dios nos libre.